20 de abril de 2016

RESEÑA DE ‘EL OLOR DEL SILENCIO’ de María Aixa Sanz (LITERATURA EN MAYÚSCULA)


LA NOVELA EN MAYÚSCULAS DE UNA MAGNÍFICA NOVELISTA


EL OLOR DEL SILENCIO es una novela sensual, erótica, profunda, reflexiva. Una novela que va más allá de las historias que se cuentan. Una novela donde María  Aixa Sanz no se detiene en la superficie sino que profundiza en los personajes, en la vida de todos ellos, se sumerge con intensidad, sin miedo, sin pasar de puntillas. EL OLOR DEL SILENCIO es una novela franca y volcánica. En ella los personajes se revuelven; y buscan en su interior las respuestas a sus preguntas. Todos ellos se abocan a una catarsis que los limpia y los regenera para seguir adelante con sus vidas. María Aixa Sanz es una novelista valiente de las que  no tienen miedo a enfrentarse con todo aquello que es capaz de albergar y esconder el alma humana; sacando de todos los personajes y las situaciones su parte positiva por ello EL OLOR DEL SILENCIO no deja de ser una novela vitalista y llena de vida que conquista al lector con las subtramas dentro de la trama y con esos relatos eróticos que vienen de la mano de Marcus  el abuelo de James, el protagonista. EL OLOR DEL SILENCIO es la mejor novela que leído en los últimos meses. Una novela de las que te encuentras en estos tiempos que corren de tarde en tarde; porque en la literatura actual parece que ni se folla, ni se come, ni se es sincero, ni los personajes se muestran como en esta novela sin máscara, con el corazón abierto, en definitiva vivos. En la literatura actual la mayoría de los escritores no sé si queriéndolo o no siguen unas pautas visibles de lo políticamente correcto. María Aixa Sanz es de llamarle al pan, pan y al vino, vino y eso se agradece. Porque lo que transmite EL OLOR DEL SILENCIO, todo lo que trasmite es auténtico. Y esa autenticidad junto a la profundidad de la historia y de los personajes es lo que ha atrapado a centenares de lectores. En EL OLOR DEL SILENCIO la vida se palpa en cada página.



© Gabriel Soladrero para Literatura en mayúscula