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8 de febrero de 2015

INOLVIDABLES: “LA LLUVIA ANTES DE CAER” de Jonathan Coe

«Dicen que un instante y la eternidad se confunden cuando experimentas una emoción intensa.»

Desde que tuve conocimiento hace unos años de la existencia de la novela ‘La lluvia antes de caer’ de Jonathan Coe supe que acabaría leyéndola. De modo que ahora que la editorial Anagrama la ha editado en su colección: Compactos, no he querido desaprovechar la ocasión. Es conocido que el instinto no se equivoca cuando te guía hacia algún lugar, pues bien, el instinto que me ha llevado a leer ‘La lluvia antes de caer’ no ha errado el tiro y ha hecho que me adentre en una espléndida novela cuyo inicio es de intriga trepidante con el fallecimiento de Rosamond y lo que hallan en su hogar, alrededor de su cuerpo; para seguidamente, cambiar y convertirse con el paso de las páginas en una historia narrada con mucha más calma de una forma profunda y tierna. Ese cambio de ritmo hace que ‘La lluvia antes de caer’ sea una de esas novelas en las que el lector, sin darse cuenta, se sumerja leyéndola en la madrugada.

‘La lluvia antes de caer’ es una atractiva lectura por la historia que se narra en ella, por la calidad de la narración y por la pregunta que lanza la propia Rosamond de: «¿Pero qué pasa con los recuerdos de los que no hay fotos, ni pruebas, ni confirmación posible?»  

Y es de esa pregunta de dónde nace y crece la novela pues como respuesta tanto Rosamond como Jonathan Coe deciden que con esos recuerdos solo cabe un modo de proceder, que es contarlos para que se vuelvan más tangibles y más reales; y de ese manera, recuerdo a recuerdo, ‘La lluvia antes de caer’ y sus personajes se convierten en inolvidables.


© MARÍA AIXA SANZ

11 de noviembre de 2013

INOLVIDABLES: “INFORME DEL INTERIOR” de Paul Auster


… Pese a la evidencia exterior, sigues siendo quien eras, aunque ya no seas la misma persona.

‘Informe del interior’ (Anagrama), el último libro de Paul Auster publicado en el mundo entero es a diferencia de ‘Diario de invierno’ —que era una biografía novelada— la memoria del autor recogida en un volumen. Paul Auster en ‘Informe del interior’ le habla de tú al niño, al chaval, al muchacho que fue. Rescatando momentos sumamente divertidos y otros altamente arriesgados por su desnudez y densidad. En un ejercicio de honestidad y generosidad se desafía a sí mismo poniendo en negro sobre blanco aspectos, cuestiones, trances y sentimientos que otros muchos callarían; y lo hace porque quiere desentrañar cuánto en su etapa adulta, madura, de hombre de sesenta y pico años hay de que aquel niño, chaval y muchacho que fue. Con una razón o excusa bastante indiscutible: «La única prueba que posees de que tus recuerdos no son enteramente engañosos es el hecho de que a veces incurres en la misma forma de pensar.» Y de una forma muy directa sin paliativos ni engaños, Paul Auster le habla al niño que fue y ante nosotros se abre todo un mundo, su mundo, desde el instante en que Auster niño fue consciente a los seis años de que discurría por sí solo, hasta el motivo por el que nunca escribió un diario; y entretanto sus pensamientos, conflictos y contradicciones sobre Dios, el hecho de ser judío, su admiración por Edison, la lealtad para con sus amigos, la lectura, la escritura de poemas, su entrono familiar, sus amores, sus desenamoramientos, el beisbol, sus nubes, sus padres, el huerto de tomates, la guerra de los mundos y su soledad. ‘Informe del interior’ es el retrato más íntimo de Paul, y cada una de las líneas de ese informe configuran y forman al Paul Auster, al novelista, al escritor que todos nosotros admiramos. De ahí la valía e importancia de este libro, al que se debe acudir con el respeto de saber que la intimidad nos será revelada. Una vez acabada la lectura comprobaremos la excelencia de este trabajo, del propósito que se marcó el tres de enero de dos mil doce Paul Auster.

«Temido aburrimiento, largas y solitarias horas de silencio y vacuidad, mañanas y tardes enteras en las que el mundo dejaba de girar a tu alrededor, y sin embargo aquel terreno desolado demostraba ser más importante que la mayoría de los jardines en los que jugabas, porque entonces fue cuando aprendiste a estar solo, y únicamente cuando una persona está a solas consigo misma puede dar rienda suelta a su imaginación.»


© MARÍA AIXA SANZ

9 de noviembre de 2013

INOLVIDABLES: “TRES VECES AL AMANECER” de Alessandro Baricco

… Pensaba en la misteriosa permanencia del amor, en la corriente nunca quieta de la vida.


‘Tres veces al amanecer’ (Anagrama) es un libro en su conjunto bellísimo compuesto de tres piezas distintas cada cual más maravillosa que se complementan más allá del tiempo y del espacio. Si el lector asiduo de Alessandro Baricco leyó en su momento 'Mr. Gwyn' y en una de esas, antes de empezar ‘Tres veces al amanecer’, decide releer ‘Mr. Gwyn’ acertará con la decisión pues  disfrutará de ambos títulos con esa extraña complicidad que sólo se da entre el lector y el autor; e incluso entenderá mejor ‘Mr. Gwyn’ y al propio Jasper Gwyn. Las tres piezas de ‘Tres veces al amanecer’ son  necesarias para disfrutar plenamente de ‘Mr. Gwyn’, créanme, puesto que tras leerlas es cuando realmente se comprende que es lo que Jasper Gwyn buscaba al escribir retratos. Se entiende aquello que Rebecca le explicó al maestro de Camdem Town: «Jasper Gwyn me enseñó que no somos personajes, somos historias, dijo Rebecca. Nos quedamos parados en la idea de ser un personaje empeñado en quién sabe qué aventura, aunque sea sencillísima, pero lo que tendríamos que entender es que nosotros somos toda la historia, no sólo el personaje. Somos el bosque por dónde camina, el malo que lo incordia, el barullo que hay alrededor, toda la gente que pasa, el color de las cosas, los ruidos.» [Página 174 de ‘Mr. Gwyn]; como también se visualiza la pasión del propio Jasper Gwyn por los vestíbulos de hotel. «Rebecca dijo que los hoteles elegantes le daban un poco de miedo, pero Jasper Gwyn le hizo notar que pocas cosas hay en el mundo tan hermosas como los vestíbulos de hoteles. Con toda esa gente que va y viene, dijo. Y todos esos secretos. Luego se lanzó a una confesión, algo que no resultaba habitual en él, y dijo que  en otra vida le habría gustado ser un vestíbulo de hotel. ¿Se refiere a trabajar en un hotel? No, no, ser un vestíbulo de hotel, físicamente. Aunque fuera de un tres estrellas, eso no importa.» [ Página 68 de ‘Mr. Gwyn’ ]

Para el lector que no ha leído ‘Mr. Gwyn’, indicarle que ‘Tres veces al amanecer’ es el título de un libro clave en la resolución de la trama de ‘Mr. Gwyn’; cabe decirle también que como el propio Baricco indica en el prólogo de ‘Tres veces al amanecer’  no es necesario haber leído ‘Mr. Gwyn’ para leer ‘Tres veces al amanecer’ y disfrutarlo; y es verdad, ‘Tres veces al amanecer’ como un libro solo, es un título que resulta ser exquisito y extremadamente cautivador y hechizante amparado en los parámetros  de la literatura donde todo es posible, como por ejemplo que los mismos personajes se encuentren en distintas épocas de su vida a distintas edades en vestíbulos de hotel, pero además ‘Tres veces al amanecer’ es un canto a los misterios del amor, a lo indiscutible del destino y a los amaneceres con la luz de los cuales es posible creer que existe una nueva oportunidad, que todo puede volver a comenzar, a renovarse, a reinventarse, incluso a expiarse.

‘Tres veces al amanecer’ es la demostración por parte de Alessandro Baricco de que de una manera irracional o racional todos somos fragmentos de una misma historia.

¡Brillante! Sencillamente, brillante.


© MARÍA AIXA SANZ

23 de noviembre de 2012

INOLVIDABLES: "MR GWYN” de Alessandro Baricco

«Rebecca pensó en cuánto camino puedes tener que recorrer, y qué misteriosas son las ruedas de la experiencia si pueden llevarte hasta sentarte en una silla, desnuda, dejándote mirar por un hombre que desde lejos ha venido arrastrando su locura hasta hacer de ella un refugio para él y para ti.

Empiezo a escribir la reseña de ‘Mr Gwyn’ (Anagrama) de Alessandro Baricco conmovida todavía por la belleza de la historia. Mr Gwynes un escritor que ha escrito tres novelas y que decide un día dejar de escribir. Diciéndose a sí mismo y a todo el mundo: «No voy a escribir ni un solo libro más.» Un amigo suyo le dice que no podrá, que el que es de nacimiento escritor, el que lo ha elegido el oficio a él y no al revés, ya sea para pasar el rato, por la fama, para firmar libros, para pasar a la posterioridad, se ve obligado por necesidad física, mental y espiritual a escribir. Mr Gwyn le contesta: «Tonterías.» Puesto que la decisión de no escribir lo torna libre. Pero a los meses empieza a sentir una angustia terrible, un vacio que no puede llenar con nada. Y empieza a escribir mentalmente. Cuenta historias en su mente. Pero eso tampoco lo sacia, y cada vez se encuentra peor. Un día la lluvia lo coge en la calle y para resguardarse se mete en una galería de arte. Entra y allí se queda contemplando cuadros de personas corriente desnudas, y hay algo que le fascina. Cuando sale de la galería tiene una idea: va a escribir retratos. El escritor contrata a una chica para que pose desnuda como si lo hiciese para un pintor, durante treinta y dos días, puede recorrer el estudio, sentarse donde quiera, andar, dormir, estar tumbada en la cama. Como si él no estuviera.

Y ahí empieza la belleza.

Si hasta entonces la novela mostraba la pasión, el amor, la necesidad de engarzar una palabra tras otra, es decir, la necesidad de escribir; cambia el paso, y entra en un profundo sosiego milimetrado y pautado y se convierte en una historia de pasión por el mirar, de amor al mirar, de necesidad de mirar, de ser mirado, de conocer a la persona desnuda, aceptándola tal cual es, contemplada como un ser único, diferente a todos los de su especie.

En ‘Mr Gwyn’ la desnudez lo envuelve todo: al escritor, al lector, al lugar. Entre lo erótico, lo sensual, lo tierno y cierta dosis de voyerismo, Baricco juega con precisión, en una historia sutil, en lo que en verdad importa es el mirar y el contar. Un mirar más profundo que no se queda en la superficie. Un mirar que transmite para poder ser contando a otros
.
Alessandro Baricco ha escrito una novela profundamente hermosa, en un homenaje a lo artesano, a los maestros artesanos, a los creadores y a su extrema sensibilidad.

© MARIA AIXA SANZ


20 de marzo de 2012

INOLVIDABLES: “TOMBUCTÚ” de Paul Auster

«… Allí era a donde la gente iba al morir. Una vez que el alma se separaba del cuerpo, lo enterraban a uno y su alma se largaba al otro mundo. Willy había insistido sobre eso durante las últimas semanas, y en la mente del perro ya no cabía duda de que el otro mundo era un sitio que existía de verdad. Se llamaba Tombuctú, y por lo que Míster Bones podía colegir, se encontraba en medio del algún desierto, lejos de  Nueva York y de Baltimore, lejos de Polonia y de cualquier otra ciudad que hubiesen visitado a lo largo de sus viajes. En un momento dado, Willy lo describió como un «oasis de espíritus». En otro momento dijo:
—Donde termina el mapa del mundo, es donde empieza Tombuctú.
Por lo visto, para llegar allí había que atravesar a pie un inmenso reino de arena y calor, un territorio de eterna nada. Míster Bones tenía la impresión de qué sería un viaje penoso y difícil, pero Willy le aseguró que no era así, que no se tardaba más que un abrir y cerrar de ojos en hacer todo el trayecto. Y cuando se llegaba, decía, una vez que se cruzaban las fronteras de aquel refugio, ya no había que preocuparse de comer, ni de dormir por la noche ni de vaciar la vejiga. Se estaba en armonía con el universo, se era una partícula de antimateria alojada en el cerebro de Dios. »

Publicada por Anagrama en 1999, ‘Tombuctú’ de Paul Auster sigue emocionando a todos aquellos lectores enamorados de los perros. Paul Auster narra en ‘Tombuctú’ los avatares de Míster Bones, un perro callejero, que cuando muere su amo debe aprender a vivir sin la protección de éste. Con él, con Míster Bones, callejearemos, buscaremos comida, un lugar para dormir, compañía, una caricia y un poquito de amor. ‘Tombuctú’ es una entrañable novela; donde Paul Auster mira de nuevo de frente a la muerte, y desenmascara esos lazos de amor que nos atan a la vida. ‘Tombuctú’ es una de esas novelas que puede releerse sin que el lector corra ningún peligro, como también es una espléndida primera lectura para todos aquellos para quienes los perros son algo más que animales. El profundo amor que Míster Bones nos ofrece no es para nada despreciable y la idea o el ardid que Paul Auster creó con Tombuctú, es cuando menos reconfortante. Un placer.

© MARÍA AIXA SANZ


12 de marzo de 2012

INOLVIDABLES: “DIARIO DE INVIERNO” de Paul Auster

… te equivocarías al decir que no fuiste feliz allí, porque no tuviste dificultad en adaptarte a las limitadas circunstancias, te resultó estimulante descubrir que podías apañártelas con casi nada, y con tal de que fueras capaz de escribir, te daba igual el sitio en que vivieras.

‘Diario de invierno’ (Anagrama) es el título de la denominada por muchos medios de comunicación autobiografía de Paul Auster, un título que en realidad corresponde más a una novela que a una biografía pues en clave de novela se lee. ‘Diario de invierno’ es el relato de un hombre que contempla como cae la nieve desde detrás de una de las ventanas de su casa en Brooklyn y espera que con la primavera llegue el primer petirrojo. Ese hombre está a punto de cumplir sesenta y cinco años y repasa ya sea por nostalgia, miedo o por un cierto asombro por haber llegado a esa edad: las vidas de las personas que ha sido clave en su historia personal y sobre todo la muerte de éstas. ‘Diario de invierno’ es un relato sobre la muerte, sobre el pánico que le produce la muerte al protagonista, un personaje que es capaz de llorar al oír un cuarteto de cuerda o leer una poesía y que es incapaz de hacerlo frente a la muerte. El hilo narrativo para que el protagonista y narrador vaya contándonos lo que es su historia: son las distintas casas en que ha vivido, las circunstancias que lo llevaron a ellas, como fue su vida allí y en que deparo su estancia. Con cada mudanza el personaje crece y madura. Cada mudanza física es una mudanza personal e íntima del protagonista de la narración, pues con cada mudanza se incorporan a su vida nuevas personas y salen otras. Cada mudanza al protagonista le suma. Se hace sabio y experto en esto tan nuestro que es la vida. Si el personaje y/o el protagonista de ‘Diario de invierno’ es el propio Paul Auster, da lo mismo. Pues si al personaje y/o protagonista le hubiese puesto otro nombre, la narración, la novela seguiría siendo igual de excelente, de una calidad literaria extrema. Además ‘Diario de invierno’ rezuma en cada página elegancia. ‘Diario de invierno’ es una obra elegante. Pocas veces se podrá leer la intimidad de alguien de una forma tan elegantemente escrita y lo que Paul Auster ha hecho con todos sus lectores, no es más que un acto de una auténtica generosidad, al no esconder que tras la historia, tras el protagonista, está él.
Ahora tras el elegante y generoso ‘Diario de invierno’ nos queda esperar el epistolario entre Coetzee y el propio Auster que Anagrama publicara en noviembre, mientras tanto seguiremos sintiéndonos afortunados releyendo toda su obra.


© MARÍA AIXA SANZ

INOLVIDABLES: "LA MÚSICA DEL AZAR" de Paul Auster

… Era una perspectiva que daba vértigo, imaginar toda esa libertad, comprender lo poco que importaba la elección que hiciera. Podía ir a cualquier sitio que se le antojara, podía hacer cualquier cosa que le apeteciera y a nadie en el mundo le importaría.

Leo ‘La música del azar’ (Anagrama) que se publicó en el año 1991 y que va por la decimotercera edición.
Una novela atemporal.
Cuyo protagonista Jim Nashe es uno de esos tipos íntegros, con cierto sabor pendenciero, que nada tiene que perder, que está de vuelta de todo y aún así diferencia el bien del mal, lo que está bien de lo que está mal. Un tipo que enamora. Nashe, es un tipo al que un golpe de fortuna le cambia la vida o los parámetros de ésta. Un golpe de fortuna con el que puede cambiar su vida de arriba abajo o de abajo arriba. Nashe apasionando lector, aficionado a la música clásica, bombero de profesión siente una profunda pasión por la carretera y por conducir sin importarle el destino. El golpe de fortuna, el azar, hace que ello sea posible y Nashe se deja llevar por ese azar sin tenerle miedo a nada, sin imaginar lo inesperado. Y cuando lo inesperado está en manos de Paul Auster las novelas toman cuerpo, lo imposible se vuelve posible, la tensión es palpable y va creciendo hasta finalizar la narración en alto.
‘La música del azar’ es una novela espectacular y Nashe unos de esos personajes tan bien definidos, tan compactos, que su personalidad traspasa la ficción para vivir en el lector. Nashe siempre será el tipo integro, fiel a sí mismo, y en quién todos los personajes secundarios se apoyaran no para hacer crecer la historia sino para hacerlo crecer a él. Pues es él la historia. Él y el azar.
¡Chapó! Auster.


© MARÍA AIXA SANZ

15 de noviembre de 2010

INOLVIDABLES: “SUNSET PARK” de Paul Auster


… y al ver a Korngold y su ex mujer al otro lado de la mesa, la intimidad y afabilidad de su forma de relacionarse, la furtiva y tácita complicidad que existe entre ellos, comprende lo solo que está, la soledad en la que vive,

Con ‘SUNSET PARK’ (Anagrama), Paul Auster da un golpe sobre la mesa y demuestra, despejando dudas, que es el escritor entre escritores, el gran novelista y ‘Sunset  Park’ la gran novela. Partiendo de una fotografía que realizó a una casucha que le llamó la atención, fabula, tira del hilo e inventa una historia que se transforma en una gran novela y da ejemplo de lo que debe ser un novelista en estado puro: el que tira de la imaginación y no novela sucesos acaecidos en otras épocas, en otros tiempos. Auster fabula, imagina y nos cuenta una magnífica historia. Sólida en argumento. Sólida en estructura. Sólida en su fin. Como una letanía hipnótica ‘Sunset Park’ penetra en el lector y éste se convierte en un animal voraz, negándose a soltar su presa.

Al lector le embarga el deseo  durante toda la novela de que a todos los protagonistas les vaya bien. Auster implica al lector en la trama de tal modo que los protagonistas son parte de su piel, son sus hermanos y esos cuatro okupas de ‘Sunset Park’, son tan nuestros como suyos: el enorme y generoso Bing Nathan, la erótica y sexual Ellen Brice, la voluntariosa y comprometida Alice Bergstrom, el taciturno y responsable Miles Heller. Aunque la novela es un tête à tête entre Morris Heller y Miles Heller, padre e hijo, los otros personajes, dado el magnífico perfil que ha creado Paul Auster, se vuelven protagonistas principales de la novela y qué decir de esos tres secundarios de lujo: Renzo Michaelson (álter ego de Auster), Mary-Lee Swann y Pilar Sánchez. Auster traza tan a la perfección los matices, los contornos de cada uno de ellos, las luces y las sombras de cada personaje  que los vuelve personas y hasta la madrastra resulta ser mala.

Paul Auster en Oviedo


Paul Auster novelista en mayúsculas ha escrito una de las mejores novelas de los últimos años, que crece con el paso de las páginas. En ‘Sunset Park’ disfrutamos de un espléndido Auster. Un Auster mejor que nunca y lo mejor es que no intenta quedar bien, sino demostrar que la vida tiene tanto de tragedia como de comedia, que las casualidades son al fin y al cabo los hitos que van trazando nuestro destino. Quizás un destino que ya está escrito en alguna parte sin remedio, sin alternativa. Eso plasma Auster en ‘Sunset Park’ con su talento magistral para  contar historias como si fuese la cosa más fácil del mundo.
Genial Auster.
Sencillamente genial.


©MARÍA AIXA SANZ


6 de septiembre de 2010

INOLVIDABLES: PATRICK MODIANO

Perfil: Patrick Modiano. El horizonte.
Autora: María Aixa Sanz
Escrito: 06/09/2010

Muchos años después, se vio otra vez por casualidad en aquella calle Bleue y una idea lo dejó clavado en el suelo: ¿podemos estar realmente seguros de que las palabras que dos personas han cruzado durante su primer encuentro se hayan desvanecido en la nada como si nunca las hubiera pronunciado nadie? ¿Y si todas esas palabras se quedasen colgadas en el aire hasta el final de los tiempos y bastase con algo de silencio y con fijarse un poco para captar sus ecos?

Patrick Modiano es uno de los nombres que captan la atención en esta rentrée de lujo que nos trae este septiembre de 2010. Modiano nos llega de la mano de Anagrama. Editorial que da el pistoletazo de salida a la temporada además de con Modiano con Echenoz, Michon, Banville, Hornby para seguir con Auster. Una delicia de rentrée por parte de Anagrama.

'El horizonte’ (Anagrama) es la nueva novela de Patrick Modiano, y con ella una nueva dosis de encuentros fortuitos, déjà vu y búsquedas. La musicalidad, la letanía suave y melodiosa de las narraciones de Modiano se extrañan en el tiempo y el lector se da perfectamente cuenta de ello, cuando tiene otra historia de Modiano entre sus manos. En ‘El horizonte’, encontramos al más auténtico Modiano, al que seduce al lector, que gustosamente se deja arrastrar por el enigma que se esconde debajo de un nombre de mujer. Si ‘En el café de la juventud perdida’ era Louki, en ‘El horizonte’ es Margaret Le Coz. Chicas que huyen. Chicas misteriosas. Chicas fascinantes. En ‘El horizonte’ es Bosmans, un escritor que 20 libros y 40 años después busca la estela, las sombras que dibujen a través del recuerdo y de los mismos lugares al que fue su amor: Margaret Le Coz. Una chica misteriosa que huía de alguien o de algo.

El lector se abandona con Modiano, se deja llevar sin darse cuenta, cómodamente, con cierto placer, sin culpabilidad, busca con él, al mismo tiempo rastros del pasado en el presente. Por algo, Modiano, es el escritor que narra de la manera más hermosa como vivir en el desasosiego. Modiano nos regala de nuevo una historia de amor, de dependencia, de necesidad que traspasa los límites del tiempo y de la memoria para tornase luz en la oscuridad. Probabilidad en el horizonte. Pues era el horizonte, llegar a él, tenerlo despejado lo que más angustiaba a Margaret Le Coz por aquel entonces. «Por lo menos, en la duda, aún queda una forma de esperanza, una línea de fuga hacia el horizonte.» Y es en el horizonte donde el lector llegará junto a Modiano en esta historia de Margarte Le Coz y Bosmans.
© MARIA AIXA SANZ



[Cada uno de estos artículos que forman PERFILES han sido todos ellos publicados en numerosos medios de comunicación de Europa y América del Sur; y a la autora le han aportado un cúmulo de satisfacciones tanto en lo profesional como en lo personal. PERFILES, es una sección que reúne los artículos elaborados por la escritora María Aixa Sanz, sobre escritores y escritoras que, sin entrar en la categoría de ensayo propiamente dicho, merecen la pena ser tenidos en cuenta como tales. (Opinión de los editores de Narrativas)]