… Para llegar a su destino debía permanecer fiel al sentimiento que
había inspirado su aventura. Poco importaba que otras personas en su lugar lo
hubiesen hecho de un modo distinto. En realidad, era inevitable. (…) Poco
importaba que no llevase un teléfono móvil. O que no hubiese planeado la ruta,
ni llevado consigo un mapa de carreteras. Tenía un mapa distinto, el de su
mente, compuesto por todas las personas y todos los lugares que iba encontrando
a su paso. Tampoco renunciaría a sus náuticos porque, pese a estar desgastados
y maltrechos, eran suyos. Había constatado que cuando una persona se encuentra
de paso y se distancia de aquello que le es conocido, las cosas extrañas
adquieren un significado nuevo. Sabiéndolo, le parecía importante permitirse
ser fiel a las intuiciones que lo hacían ser quien era y lo distinguían de los
demás.
La buenísima novela que acaba de
publicar Salamandra de Rachel Joyce es todo un descubrimiento
para el lector, pues éste reverbera y alcanza instantes de absoluta felicidad
junto a Harold Fry el protagonista de
‘El insólito peregrinaje de Harold Fry’.
Aunque la historia tiene los posos de la dureza de la vida y está rotundamente
marcada por ella, no deja en ningún momento desamparado a nadie y cuando a Harold Fry le flaquean las fuerzas, el
lector como tiene ganas de seguir adelante porque cree en Harold, le empuja a
seguir. Harold Fry es uno de esos
personajes que cuando te los encuentras en la literatura quieres que por favor
todo le vaya bien.
Harold Fry decide un día, sin pensarlo, en vez de tirar una carta
al buzón dársela en persona a su destinataria, en un rapto de honrada lealtad;
y esa acción cautiva al lector al instante. El viaje que emprende le sirve de
expiación y de filtro, también le sirve de foco de luz, e ilumina toda su vida,
la enfoca y le da un nuevo sentido y una nueva oportunidad a él y todo su
pequeño mundo. Todo con un acto tan sencillo como es poner un pie tras otro, todo
con un acto tan valiente como es cumplir una promesa. Harold Fry es el héroe de nuestros días y la historia: ‘El insólito peregrinaje de Harold Fry’, es
una formidable novela; llena de pequeñas lecciones; de pequeños acontecimientos
de una belleza austera y real; y de unos personajes secundarios fugaces pero
transcendentales.
Sí. ‘El insólito peregrinaje de Harold Fry’ es una formidable novela.
Un descubrimiento brillante.
© MARÍA AIXA SANZ